El gran escritor oscense de Quicena nos deja una obra imperecedera y el recuerdo de su amistad
Javier Tomeo ha fallecido este sábado, el primero del verano de 2013.
Escritor de carácter, sumamente imaginativo, con un mundo propio original, de tintes kafkianos y buñuelescos, Tomeo ha sido un maestro de la parábola y del cuento. De estilo sobrio y minimalista, sus historias, sus narraciones, parten del desconcierto y se resuelven en finales abiertos a la libertad interpretativa del lector. Sus ficciones contienen crítica social, y una visión dramática y existencial de la condición humana, pero también lírica, humorística, subterráneamente simbolista, que se declara contra dictaduras, tópicos, falsos idealismos y prejuicios.
Traducido a varios idiomas, ha compendiado lo universal de su literatura, con el continuo contacto con su Aragón de origen, a donde regresaba desde Barcelona para colaborar en proyectos de todo tipo.
Tomeo fue un clásico en vida, y ahora lo será aún más.
Pero, además de todo eso, Javier Tomeo era un amigo entrañable, que colaboró con Rolde de Estudios Aragoneses en varias ocasiones. Nos regaló relatos para la revista Rolde, como «Los jugadores de ajedrez» (número 44-45, 1989, presentado por nuestro llorado amigo Félix Romeo) y «Las muecas de la lechuza» (número 99-100-101, 2002), y se mostró entusiasmado cuando, en 2003, editamos sus célebres Historias Mínimas traducidas al aragonés: Istorias menimas.
También en Rolde, fue entrevistado por Ramón Acín («Javier Tomeo: la fidelidad a los orígenes», número 44-45, 1989) y, más recientemente, escribió un recuerdo a Félix Romeo en el número 138-139 (2011), que dedicamos a la memoria de Félix.
Javier Tomeo recibió jubiloso la invitación, por parte de REA, a formar parte del Comité de Honor de nuestra asociación, y mantuvo una jugosa conversación con Ismael Grasa, reflejada en el libro Los nuevos ilustrados (2007), que recogía entrevistas a todos los miembros de dicho Comité.
REA manifiesta su más sentido pésame a la familia de Javier Tomeo, sumándose a las condolencias por esta pérdida para las letras y la cultura aragonesa, de la que Tomeo fue un exponente libre y universal.
Queda su recuerdo y una obra rica e imperecedera.
Nuestra asociación hace pública su gratitud a un amigo genial y generoso.
- Rolde 44-45 (1989): Relato «Los jugadores de ajedrez», presentado por Félix Romeo, y entrevista de Ramón Acín
- Rolde 99-100-101 (2002): Relato «Las muecas de la lechuza», ilustrado por Silvia Ayats
- Istorias menimas (2003), capítulo XXI
- Entrevista de Ismael Grasa en Los nuevos ilustrados (2007), con fotos de Cristina Grande
- Texto dedicado a Félix Romeo en Rolde (2011)