En 2007, Rolde de Estudios Aragoneses creó su Comité de Honor compuesto por representantes de diferentes ámbitos de trabajo en los que han adquirido cierta «excelencia»: profesores e investigadores, científicos, artistas, escritores… vistos como un punto de referencia para REA, y también para la sociedad aragonesa.
REA entendió que la mejor forma de trasladar a la ciudadanía lo que los miembros del Comité de Honor representaban, era dedicarles un libro del que ellos mismos fuesen protagonistas, y en el que ellos mismos se retratasen ante la sociedad. Así se concibió Los nuevos ilustrados, un libro de vidas, de preguntas, de respuestas y de reflexiones, en el que participó un nutrido elenco de entrevistadores y de fotógrafos. De esta forma, cada conversación tenía su propio discurso, su identidad, dentro de un molde en apariencia homogéneo.
El Comité se compuso con personas con un amplio currículo en la reivindicación y la gestión de espacios de libertad (Jesús María Alemany y José Luis Batalla), artistas plásticos (Natalio Bayo, José Luis Cano, Pepe Cerdá y Jorge Gay), historiadores (Gonzalo Borrás, Julián Casanova y Eloy Fernández Clemente), gente del cine, la televisión y el teatro (Alfredo Castellón y Paco Paricio), escritores (José Antonio Labordeta, Ignacio Martínez de Pisón y Javier Tomeo), científicos (Vicente Martínez Tejero), filósofos (Andrés Ortiz-Osés), lingüistas (Francho Nagore y Artur Quintana) y arquitectos (José Manuel Pérez Latorre). Ninguno de ellos puede resumir su actividad o su filiación a una única etiqueta (que suele esconder personalidades más complejas), y todos, sin excepción, pueden ser considerados gente abierta y tolerante.
Por desgracia, ya hay cuatro miembros del Comité de Honor que no están con nosotros: José Antonio Labordeta, Javier Tomeo, Alfredo Castellón y Gonzalo Borrás.
El Comité de Honor es un laboratorio de excelencia, un vivero de ideas, complementario a cualquier otra fuente de la que se surta REA para sus proyectos, que se dirige hacial el objetivo de dignificación y promoción de la cultura aragonesa que persigue nuestra asociación. Y es también una muestra de agradecimiento, extensivo a todos los hombres y mujeres (socios, suscriptores, autores de artículos, de textos, de ilustraciones, colaboradores ocasionales o no tanto en cualquier tarea relacionada con el trabajo asociativo…) que alguna vez, y para bien, han coincidido con nosotros.